Pan Duro

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3 Comentarios
Fotografía de Lee Jeffries

La vida se trata de aprovechar lo que te rodea o lo que te lleve tu entorno, venga del aire, del agua o de la tierra. Del fuego no. El fuego todo lo quema o... lo cocina. Sí que es útil para cocer lo que sea que los otros tres elementos provean. Hoy tocó tierra. El menú sin convertirse en presa se pasea orondo por allí. Va una... van dos... van tres... A la cuarta, más gorda y por ende nutritiva, no la dejamos ir. Uno se vuelve experto cada vez no solo en atrapar, sino también en elegir. La única que cuesta es la primera, lo demás sigue fácil después de esa. Para que no se escabulla con alguna artimaña de sus dientes o pezuñas hay que estar alerta hasta tirarla al fogón, consistente en una rejilla si se quiere al horno o una rama, si se quiere en brasas. Algunas veces se consigue una cazuela, pero el guisado siempre es un problema. Al igual que la falta de cubiertos.
— ¡Espera! Todavía no está. 
—Va, pero no la dejes quemar.
¡Qué impaciente! Cierto que uno se descuida un minuto y en lugar de carne cocida come carbón, aunque así sigue siendo mejor que cruda. Esta sale al punto y tostadita; unos segundos que se enfríe un poco y mesa servida, con las manos todo se simplifica.
— ¿Qué parte me dejas esta vez? ¿La de la cola o la cabeza?
—La que quieras. Eso sí: si mañana toca el mismo menú, las ratas las cazas tú. 
Ojalá pudiéramos cambiar el platillo... Mientras tanto, nos quedará soñar con pollo o pescado fritos a cada mordisco. 

Aldo Simetra





3 comentarios:

  1. Y luego que digan que el hombre es la única especia animal capaz de modificar el entorno en el que vive a su conveniencia... ¡Pero si somos la que mejor se adapta al ecosistema! El "homo urbanita" es el mejor ejemplo. Está el que lo crea y el que se adapta a él.
    Como siempre, un placer de lectura.
    Un fuerte abrazo

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  2. Perdón, he escrito especia aunque, por supuesto, no quería referirme al mundo culinario, je... Creo que el editor de texto cambia las palabras a su antojo, ¿no es cierto?... Menos ´mal que releo los comentarios que escribo

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  3. No me diga que lo hizo pensar en cocina el menú del micro, jeje! Cierto que el editor de texto siempre hace de las suyas, aunque aquí entre nos a los "urbanitas" del relato no les vendría mal un poco de especia para condimentar su comida. Concuerdo con lo que comenta del hombre como especie; tal cual dice, dentro (o fuera) del ecosistema, siempre estará quien lo cree (o destruya) y quien se adapte (o se resigne).
    Agradecido, Isidoro. Un gran abrazo desde por acá.

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